Mermelada de moras silvestres :-D

Los días Santos los pasé en Satevo, el pueblo donde mi abuelita Carmen vivió casi hasta sus últimos días de aliento, y que a mí, a mís hermanas y primos cada vacación nos vio crecer de a poco hasta que llegó un momento que nos hicimos demasiado viejos para emprender nuevas aventuras y juegos por sus senderos. 
      Aún mi familia conserva la vieja casa con patio central, donde reyna una mora que cobija con su sombra un séquito de granados enanos que se resisten a morir y siguen regalandonos año con año las mejores granadas del mundo :-D. Este año recordé que mi abue solía aprovechar las moras para hacer mermelada, así que puse manos a la obra y aquí les presento el resultado :-D.
Así que... ¡ ya tenemos mermelada de mora silvestre !